Duelo: ¿Cómo sobrellevar una pérdida importante?

El duelo es una emoción que afecta a las personas de diferentes maneras, por lo general y de manera universal, lo concebimos como un proceso post pérdida de un ser querido, de algo o alguien que amas. Se vive de diferentes maneras ya que pertenece a una respuesta propia y personal. Esta respuesta de dolor tiene diferentes intensidades pudiendo ser absolutamente abrumadora por lo que desestimar lo que cada persona pueda sentir debe ser respetable.

Según Paz Lorca, directora de la Escuela de Desarrollo Social del Instituto de formación Técnico Profesional IACC, existen diferentes maneras de enfrentar el duelo, desde una respuesta personal a una social (políticamente correcta).

Aunque comúnmente se asocia con la muerte de un ser querido, el duelo también puede surgir por otras pérdidas, como el fin de una relación importante, la pérdida de empleo, la venta de una casa familiar o incluso la pérdida de salud, emoción que afecta a las personas de diferentes maneras en tiempo e intensidad.

Etapas del duelo

Existen respuestas al duelo que surgen de eventos inesperados como esperados, pero todos tienen su proceso personal en cualquier etapa de la vida.

“El duelo ante una pérdida inesperada presenta características específicas que guían el proceso en una dirección particular”, agrega Lorca.

La forma en que se recibe la noticia también influye en el proceso de duelo y los tiempos de reparación también depende de cada persona:

• Recibir la noticia
• Sensación de irrealidad: estado de shock
• Impacto: miedo, pánico, negación
• Sentimientos de culpa
• Respuesta biológica del organismo

El duelo anticipado es un proceso que experimentan algunas personas antes del fallecimiento de un ser querido. A diferencia del duelo convencional, que ocurre después de la muerte, el duelo anticipado se desarrolla sabiendo que la pérdida está próxima.

• Enfermedad terminal: El escenario más común para el duelo anticipado es cuando un ser querido padece una enfermedad crónica y terminal. Los médicos han informado a la familia que el enfermo fallecerá en un período de tiempo. Estar preparados permite de alguna manera autogestionar las emociones.
• Intensidad emocional: Las emociones durante el duelo anticipado pueden ser tan intensas como diversas, sin embargo, permiten tomar acciones ante lo que vendrá.

El duelo es un proceso complejo y doloroso, y cuando se trata de niños, es importante acogerlo con empatía y respeto.

Cómo enfrentar la pérdida

Una manera de enfrentar el duelo a través de la educación emocional es reafirmando que cada persona vive de acuerdo con su formación (cultural y religiosa) y propia historia y por sobre todo se vive y comprende en tiempos diferentes por lo que lo principal de acuerdo al contexto es

• Explicar la realidad de la muerte: Lenguaje claro y simple, utilizando palabras apropiadas para la edad del niño. Explicar de manera simple lo que sucedió sin tanto detalle para explicar la situación.
• Respetar sus expresiones de dolor y tiempos: Permitir que los niños expresen sus emociones a su propio ritmo. No los presione para que se sientan de cierta manera o para que superen rápidamente la pérdida.
• Acompañarlos en el proceso: Abrazar y brindar amor, cariño y paciencia. Los niños necesitan sentirse amados y seguros durante este momento difícil. Esté disponible para escuchar sus pensamientos y sentimientos.
• Comunicación abierta. Preguntar cómo se sienten y animarlos a compartir sus emociones. Explique que está bien sentir tristeza, enojo o confusión.
• Ayudarles a recordar al ser querido: Hable sobre los buenos momentos que compartieron con la persona fallecida. Puede ser útil crear un álbum de recuerdos o escribir cartas para expresar sus sentimientos.
• Buscar apoyo profesional si es necesario: Si nota que el niño está luchando demasiado o que su dolor es abrumador, considere buscar ayuda de un terapeuta o consejero especializado en duelo infantil.

También te puede interesar…

El impacto de las tecnologías en la lucha contra incendios

Incendios: expertos indican cómo cuidarse ante la presencia de humo