En un mundo hiperconectado, no parece descabellado el que las tecnologías apunten a prevenir riesgos y catástrofes como las que estamos viviendo hoy en la V Región… ¿Será una realidad cercana el que podamos usarlas a nuestro favor incluso para prevenir desastres incontrolables por el ser humano?
Según Hugo Barriga, director Escuela Tecnologías Aplicadas IACC, quizás la respuesta es más evidente y cercana de lo que pensamos… las tecnologías emergentes más prometedoras para la prevención de incendios forestales ya están aquí:
Estas tecnologías están siendo aplicadas actualmente tanto en Chile como en otros países:
En California, uno de los estados más afectados por incendios forestales en los EE. UU., se utilizan drones y satélites para mapear incendios en tiempo real y predecir su propagación. La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) y la NASA juegan roles clave en el suministro de datos y análisis a través de sus satélites. Además, proyectos como FireGuard y el uso de la inteligencia artificial por parte de la Universidad de California, Berkeley, están avanzando en la detección y modelado de incendios.
Tras los incendios forestales de 2019-2020, Australia ha intensificado el uso de tecnologías como drones y sensores remotos para monitorear la salud del bosque y detectar incendios tempranamente. La plataforma Digital Earth Australia utiliza datos satelitales para ofrecer información accesible sobre el terreno y la vegetación, lo que ayuda en la planificación de la gestión del fuego.
La Unión Europea ha implementado el sistema Copernicus, un programa de observación de la Tierra que proporciona datos cruciales para la gestión de desastres, incluidos los incendios forestales. Este sistema incluye servicios de mapeo de emergencia que pueden activarse para apoyar la respuesta a incendios forestales, ofreciendo imágenes satelitales detalladas para la coordinación de las operaciones de extinción y recuperación.
España utiliza tecnologías para la prevención y gestión de incendios, incluido el empleo de sistemas de información geográfica y modelos de simulación de incendios para mejorar la planificación de la gestión del terreno y la respuesta a incendios. Además, se han implementado sistemas de vigilancia y detección temprana, utilizando torres de observación equipadas con cámaras y sensores.
En la provincia de Alberta, se ha desarrollado un sistema de inteligencia artificial para predecir la propagación de incendios forestales, lo que ayuda a los bomberos a decidir dónde y cómo enfocar sus esfuerzos de extinción. También utilizan drones para obtener vistas aéreas detalladas de las áreas afectadas por los incendios.
Entre las mismas, la inteligencia artificial (IA) se nota especialmente innovadora y con un porvenir lleno de grandes promesas. Y no sólo la IA, si no que los sistemas de aprendizaje automático se destacan como particularmente eficaces e innovadores. Esta eficacia se debe a su capacidad para analizar grandes volúmenes de datos de diversas fuentes, como imágenes satelitales, sensores remotos, y estaciones meteorológicas, y utilizar esa información para predecir riesgos de incendios, modelar su potencial propagación, y optimizar la respuesta a emergencias.
Hablar de tecnología es también hablar de inversión. ¿Cuáles son los principales desafíos para implementar estas tecnologías en Chile y cómo se pueden superar?
Pero sin lugar a dudas, siempre toda tecnología debe ser aplicada con dos elementos clave, la conciencia y educación. Estar informado sobre las causas y riesgos de los incendios forestales, y entender cómo las actividades humanas pueden contribuir a los incendios es el primer paso para prevenirlos.
Si quieres estar a la vanguardia de las tecnologías y su uso en la prevención, Conéctate con Ingeniería en prevención de riesgos de IACC.
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